sábado, 26 de enero de 2013

Ay, Gaviota, aaay!!



Había hablado antes en este espacio sobre Enrique Peña Nieto mucho antes de que le viéramos colgarse la banda presidencial en San Lázaro, en tanto afuera se cometían los más terribles atropellos desde el primer día de su gobierno.

Mucho se ha hablado también de las desventajas enormes de que la silla presidencial de nuestro país esté ocupada por un personaje impuesto desde la publicidad, de la escuela de Atlacomulco y apadrinado por Carlos Salinas.

Se han llenado páginas completas para hablar de la ineptitud de quien, aún siendo candidato, dio visos de incompetencia y frivolidad en diversas ocasiones, así como de apatía y cinismo en muchas otras. Tales características se normalizaron en los foros de discusión, en los noticieros, digamos que "se puso de moda", al grado de que era cada vez más común ver personajes incompetentes, frívolos, apáticos y cínicos en el ámbito de la política. Similar a lo sucedido con el medio del arte y la cultura (hoy, medio del espectáculo), que desde hace años se ha venido convirtiendo un poco en lo mismo ante la opinión pública.

De este modo a los mexicanos les ha ido costado cada vez más trabajo reconocer la diferencia entre las verdaderas intenciones políticas y los reality shows de la tele, y desde esa lente es que juzga, y desde esa lente es que opina.

Por ello no es de extrañarse que la actual primera dama, actriz de carrera, y hoy fuerte candidata a la presidencia del DIF haya sido objeto de las más crudas burlas que poco o nada tienen que ver con su papel político.

¿Quién es Angélica Rivera? Bueno, pues creo recordar que desde mi adolescencia la mujer salía en todos lados, era "hija consentida de Televisa" por así decirlo. Aparecía en revistas, telenovelas y programas musicales como una "cara bonita" (fue Rostro del Heraldo en 1987, presea otorgada como padrinazgo a una mujer bella para iniciar su carrera artística). Su personaje en la telenovela "Muñecos de papel" era el de una niña presumida que buscaba fama a como diera lugar. Recuerdo haberla visto por ahí conduciendo algún programa, y más tarde protagonizando "La Dueña". Así, sin dudar de las ventajas de su belleza, pero tampoco de su trabajo y empeño para llenar la pantalla con ese personaje, se fue ganando un lugar en los hogares mexicanos, encariñados con lo sobre actuado de sus personajes, pero a la misma vez con la seducción de su carisma.

Se cuenta que hubo por ahí una candidatura secreta al interior de Televisa (empresa que desde su origen ha estado ligada a los grandes círculos de poder en México) para buscar a una mujer con trayectoria limpia, guapa y querida por el "pueblo mexicano" (pronúnciese así, con intención peyorativa) que se ennoviara con quien sería el presidente en 2012. Se mencionaron nombres como Lucero (imagen del atruismo Teletonesco y cuya separación con Mijares ya sonaba con mucha fuerza, bautizada como "La Novia de América"), Angélica Vale (hasta entonces eterna soltera e hija de quien en su momento ostentara el título de "La Novia de México") y algunos otros nombres menos importantes como Jacqueline Bracamontes. La ganona fue Angélica Rivera, quien acababa de tener un enorme éxito con la telenovela "Destilando amor", protagonizando uno de los personajes mejor escritos en la historia del melodrama en Latinoamérica: "La Gaviota".

El resto de la historia es harto conocido: divorciada de su entonces marido, un famoso productor; Angélica empezó a ser vista con frecuencia acompañando al entonces gobernador del Estado de México, recientemente viudo. De ahí en adelante esto siguió, hasta llegar con él al altar en el año del Bicentenario... y a la residencia oficial de Los Pinos dos años más tarde.

El punto aquí es el delicado tema de burlarse de ella como MUJER y no como PERSONA PÚBLICA.

Considero que el pueblo tiene derecho de hacer uso de la sátira para atacar como forma de supervivencia emocional a quienes ostentan el poder y le oprimen con sus abusos, pero teniendo en cuenta lo que mencionaba al principio, es muy fácil perderse en trivialidades que hablan sobre su pasado como actriz, en donde lo que más se explotó comercialmente siempre fue su cuerpo y su cara.

Lejos de apasionamientos, filias y fobias políticas, veo el caso de una MUJER. En cierta sexy-entrevista con Shanik Berman (click para ver) siendo aún muy jovencita, dio cátedra de lo que todas las mujeres de su edad, famosas y no, pensaban de ciertas cuestiones. Puede decirse que lo hueco de sus respuestas fue debido al perfil del programa y de la entrevistadora, pero no: creo que es parte de la educación de la que proviene, de lo elemental de su pensamiento, de los estereotipos pre concebidos de lo que una pareja debe de ser, de lo que una familia debe de ser, de lo que un hombre y una mujer deben de ser. Al parecer creció rodeada de machistas, su padre divorciado varias veces, con muchos hijos, "coqueto y fiestero", con la idea de que la mujer debe estar "como la escopeta: cargada y en un rincón".  Y por si esto fuera poco, concentrando una buena parte de su valía como persona en su atractivo sexual, como se aprecia en esta entrevista, "en sus pompas".

No debe ser fácil crecer en un medio como ese, teniendo la exigencia de ser "eternamente bella bella". Ser una estrella, una dama en apariencias hasta que el cuerpo aguante. Si bien parece que Angélica Rivera siempre fue ambiciosa, (su hombre ideal era "alguien que sea importante en lo que haga") no podemos pasar por alto los rumores sobre la supuesta VIOLENCIA FÍSICA que vive con el actual presidente, altamente creíble desde los diversos cuestionamientos que existen en torno a la muerte de la esposa anterior y a las varias amantes que han salido a la luz pública queriendo contar sus experiencias. Además del ALTO ÍNDICE DE FEMINICIDIOS perpetrados durante su gestión en el Estado de México, misma que elevó el nivel de asesinatos a mujeres por encima de la entonces tristemente célebre Ciudad Juárez. (Lee artículo de Lydia Cacho)

Es de todos sabido que en los medios de la política y el show bussiness es donde más corrupción sexual existe: el uso y abuso del poder masculino sobre mujeres hermosas que quieren alcanzar fama y/o fortuna sin importar lo que tengan que hacer, es una mezcla de perversiones que no permiten a la mujer competir de igual a igual con los hombres a menos que se masculinicen atrozmente.

El hombre guapo e interesante, rico y divertido que debió parecer Peña Nieto desde que era un estudiante universitario, pudo haberle atraído cualquier cantidad de admiradoras cuyos placeres no creo que haya desperdiciado la oportunidad de aprovechar. Sus escándalos sexuales ahí están.

La joven guapa y con ganas de brillar que era Angélica Rivera desde muy chavita debió hacerla el blanco de la codicia de muchos hombres también, pero al parecer nunca se vio envuelta en escándalos de amoríos, se casó "como Dios manda", tuvo sus hijitas y siguió trabajando en proyectos de éxito.

Ahora casada con el primer mandatario, no quiero ni imaginar lo difícil que ha de ser la vida al interior de la casa... y sí, seguramente dirán que "con dinero baila el perro", que por la seguridad de su familia, una casa y estabilidad económica de por vida, cualquiera se aguantaría las supuestas golpizas que le da Peña Nieto.

Seguramente dirán que es una pareja moderna, "open mind" en donde el copetón puede acostarse con quien quiera mientras que a ella y a su familia no le falte nada, pero más que perder el tiempo en cuestiones domésticas sobre la vida de esta mujer, postura que sólo acentúa el rencor hacia lo femenino, dejemos en paz a "La Gaviota" y exijamos de la parte masculina de esa pareja presidencial, el trabajo y el compromiso (aunque para muchos de nosotros de pronto ya signifique un tiempo perdido).

No le veo el caso a seguirle diciendo prostituta y exhibiendo las fotos de sus "escenas candentes" o sus poses en bikini. Ahí no está el discurso. La mujer está en su derecho de lucir bella, y estuvo en su derecho de escoger los proyectos actorales que le exigían tal o cual cosa de su imagen personal. NO TIENE NADA DE MALO MOSTRAR EL CUERPO O HACER ESCENAS ERÓTICAS.

Entiendo que es sólo un pretexto para decir que ya se veía desde chica que "la cabra tiraba al monte" como dicen vulgarmente, que su ambición la llevó a venderse a un plan con maña orquestado desde su empresa y desde el gobierno. Comprendo lo que pretenden las diversas alusiones a su actual situación. Que si se fue a meter a la boca del lobo y que por eso ahora le pegan, sí, esa también fue decisión suya. No creo que sea buena vida... y la verdad, no me interesa.

Ya dediqué todo este post a hablar de mi opinión al respecto y no pienso hablar de lo mismo después, sólo quería dejar claro que lo que Rivera haga con su cuerpo sólo es cuestionable desde el punto de vista PÚBLICO, no del PRIVADO. Se casó con un personaje siniestro que finge gobernar bien y con justicia uno de los países más hermosos de este planeta. No sólo no lo gobierna, y menos bien, sino que lo sigue sumergiendo en la ruina, y a cambio ella sólo debe lucir bonita y sonreír ampliamente, algo para lo que ya fue largamente entrenada.

Cuidado con el nivel de crítica, que no se quede en que es una cualquiera barata. Barata no, señoras y señores. Barata no, pero eso no es lo importante. Sus carísimas caricias nos cuestan a todos y todas: ahí está la diferencia.

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